Imputaron al ministro de Salud Lugones por "abuso de autoridad" en el Garrahan: Crece el escándalo por el vaciamiento del hospital pediátrico

La Justicia Federal dio un paso significativo en la investigación contra el ministro de Salud, Sergio Lugones, al imputarlo por el delito de "abuso de autoridad". La decisión judicial, que agrava la ya delicada situación del funcionario, surge a raíz de la denuncia presentada por la exdiputada Elisa Carrió, quien acusó a Lugones de exigir, de manera presuntamente ilegal, la renuncia de la totalidad del Consejo Directivo del Hospital Garrahan, el centro pediátrico de referencia en el país.

Imputaron al ministro de Salud Lugones por "abuso de autoridad" en el Garrahan: Crece el escándalo por el vaciamiento del hospital pediátrico

Esta imputación no hace más que confirmar las graves denuncias que desde hace semanas vienen realizando médicos, enfermeros, personal de salud y gremios, quienes advierten sobre un sistemático "vaciamiento" del Garrahan por parte del gobierno de Javier Milei. La purga de autoridades, interpretada como un intento de avanzar en la precarización y desfinanciamiento del hospital, se enmarca en una política de ajuste que amenaza con desmantelar uno de los pilares de la salud pública argentina.

Un ataque frontal a la salud pública: el "vaciamiento" del Garrahan

La denuncia de Carrió y la posterior imputación a Lugones exponen la lógica detrás de las políticas del gobierno libertario. Lejos de fortalecer la salud pública, se observa un patrón de debilitamiento institucional y presupuestario que pone en riesgo la atención de miles de niños y niñas en todo el país. La presión sobre el Consejo Directivo del Garrahan, que se venía resistiendo a las imposiciones oficiales, es un claro indicio de la intención de instalar cuadros afines para avanzar con los recortes.

Médicos y enfermeros, que han salido a las calles en reiteradas ocasiones para denunciar esta situación, alertan sobre la falta de insumos, la precarización laboral y la reducción de personal. El Garrahan, orgullo de la salud pública, se encuentra hoy bajo ataque, y la imputación del ministro Lugones no hace más que echar luz sobre las oscuras maniobras detrás de este desmantelamiento.

La justicia avanza, el gobierno se atrinchera en el silencio

Mientras la investigación judicial avanza, el ministro Lugones y el gobierno de Milei mantienen un hermetismo casi absoluto. Las acusaciones de abuso de autoridad y el creciente escándalo por el "vaciamiento" del Garrahan son minimizadas o directamente ignoradas por las autoridades. Esta actitud, lejos de tranquilizar a la población, profundiza la preocupación por el futuro de la salud pública en Argentina.

La imputación de Lugones no es solo una cuestión legal, sino un reflejo de la creciente conflictividad social que generan las políticas de ajuste. La defensa del Garrahan se ha convertido en un símbolo de la lucha por la salud pública, y la justicia, en este caso, parece empezar a escuchar el clamor de quienes defienden un sistema sanitario universal y de calidad para todos. La sociedad exige respuestas y el fin de la precarización de un derecho fundamental como la salud.