El Salario Mínimo Vital y Móvil (SMVM) se Derrumba
En los últimos 16 meses, el Salario Mínimo Vital y Móvil (SMVM) ha sufrido una brutal pérdida de poder adquisitivo, licuándose en un alarmante 31%. Esta debacle no es un mero dato estadístico, sino un golpe directo a la subsistencia de la clase trabajadora, especialmente a los sectores más vulnerables que dependen de este ingreso mínimo para cubrir sus necesidades básicas.

Esta situación es una clara manifestación de las políticas económicas que priorizan la acumulación de capital por sobre el bienestar del pueblo trabajador. La inflación descontrolada, la devaluación constante de nuestra moneda y la falta de medidas efectivas para proteger los salarios han erosionado la capacidad de compra del SMVM hasta niveles alarmantes.
Este retroceso implica que miles de trabajadores y sus familias tienen hoy un acceso significativamente menor a alimentos, vivienda, salud y educación. Se profundiza la desigualdad social, mientras una minoría se beneficia de la especulación financiera y la fuga de capitales. La respuesta del gobierno actual, basada en ajustes y una supuesta "estabilización" macroeconómica que no llega a los bolsillos de la gente, es a todas luces insuficiente.
Se requiere un cambio de rumbo urgente, con medidas concretas como: * Aumento significativo del SMVM que realmente recupere el poder adquisitivo perdido y se ajuste periódicamente por inflación. * Implementación de políticas de control de precios efectivas para frenar la especulación y garantizar el acceso a bienes esenciales. * Fortalecimiento de los mecanismos de negociación colectiva para que los sindicatos puedan defender salarios dignos para todos los trabajadores. * Redistribución de la riqueza a través de impuestos progresivos a las grandes fortunas y políticas que favorezcan la producción nacional y el empleo genuino.
La pérdida del 31% del poder de compra del SMVM en tan solo 16 meses no es una fatalidad, sino el resultado de decisiones políticas concretas. Este es un ataque directo a los derechos de los trabajadores y exigimos medidas urgentes y profundas para revertir esta situación y construir una sociedad más justa e igualitaria. La defensa del salario digno es una lucha fundamental por la dignidad de la clase trabajadora.