La Argentina de Milei: Mientras pocos viajan, millones se hunden en la pobreza
La cruda realidad económica en Argentina bajo la gestión de Javier Milei se desnuda con cifras que confirman lo que las calles ya gritan: el poder de compra de la canasta básica ha caído hasta un 15%, asfixiando a millones de familias y profundizando la pobreza.
Redaccion
Paradójicamente, este desmoronamiento contrasta brutalmente con un dato que expone la matriz de este modelo: el poder adquisitivo para importar y viajar al exterior se acerca a los máximos del siglo.
Este abismo entre dos realidades no es casualidad; es la consecuencia directa de un plan económico que beneficia explícitamente a las clases acomodadas y a los sectores vinculados al capital financiero y exportador, en detrimento de la gran mayoría del pueblo trabajador. Mientras una minoría puede planificar viajes y adquirir bienes importados con mayor facilidad, la mesa de los argentinos se achica día a día.
La promesa de "libertad" y "prosperidad" se traduce, para millones, en la angustia de no llegar a fin de mes. Los indicadores de pobreza se disparan, y el acceso a los bienes esenciales se vuelve un lujo inalcanzable. Este modelo, lejos de ser un camino hacia el desarrollo equitativo, profundiza la brecha social, consolidando una Argentina para unos pocos y sumiendo en la precaridad a la inmensa mayoría.
Es una radiografía sin maquillajes de un gobierno que prioriza los intereses de los sectores concentrados, dejando al margen las necesidades básicas de la población. La disyuntiva es clara: o se sigue por este camino de ajuste y exclusión, o se construyen políticas que pongan en el centro la dignidad y el bienestar de todas y todos los argentinos.
